¿Quién no ha visto una y otra vez El apartamento. Una de las películas inolvidables e irrepetibles de la historia del cine. El gran Willy Wilder nos noquea con su insuperable humor y su dominio de las situaciones narrando una historia sobre la dignidad de dos personas corrientes.
Por si fuera poco, la breve introducción que hace Budy (Jack Lemmon) de la compañía de seguros en la que trabaja es una de las mejores expresiones de cómo estamos dominados por los números.
Lemon bailando al ritmo de la calculadora mecánica es otro detalle maravilloso.
La película fue estrenada en 1960 es todo un lujo para mostrar el estado del cálculo en los momentos previos a la comercialización masiva de las computadoras.
Otra perla matemática es el uso de los espejos para dar una perspectiva infinita a la inmensa oficina de cálculo.
Matemáticas de cine 
¡Bueno no voy a dejar este post sin palabras!. Entrañable e interesante artículo. Sí, en verdad, la vida en una parte de ella son números, es cierto. Lo más admirable es cuando las vivencias de la vida no se pueden describir con números, ahí se produce el misterio. En fin romanticismo en el calculo adecuado y en el no cálculo. Si un matemático no es un matemático romántico, entonces no es un matemático del todo.